Tu trabajo vale periodista turístico: cuando decir “no” también es profesionalismo
- Foro Periodismo Turístico

- 7 oct
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En el mundo del periodismo turístico, estamos acostumbrados a recibir mensajes de destinos, empresas o marcas que, con la mejor intención o por simple costumbre, piden que publiquemos información sobre ellos. “Podrías difundir esta nota”, “¿Nos hacés una entrevista?”, “Te paso el comunicado para que lo subas”… frases que llegan a la bandeja de entrada casi todos los días.
Pero hay algo que debemos recordar: nuestro trabajo tiene valor, y ese valor no se mide solo en clics o likes, sino en tiempo, trayectoria, criterio y ética profesional.
Porque una cosa es difundir con sentido, y otra es trabajar gratis para quienes sí tienen presupuesto.
No es lo mismo ayudar a un emprendimiento pequeño que está empezando, por empatía o por vocación de apoyo, que publicar material promocional de destinos o empresas que claramente invierten en publicidad y comunicación… pero no consideran incluir a los periodistas turísticos dentro de esa inversión.
Decir “no”, no es soberbia. Es poner límites sanos y reconocer que cada nota, entrevista o mención tiene detrás horas de investigación, redacción, edición y experiencia acumulada.
Por eso, si no estuviste en el destino, si no fuiste invitado oficialmente o si no se trata de una acción periodística real, no tenés por qué publicar nada.
Si quieren una entrevista o un espacio de visibilidad, deben entender que ese es un servicio profesional que se cobra, como se cobra cualquier otro trabajo especializado.
Además, aceptar hacerlo “por compromiso” o “para quedar bien” solo alimenta una lógica desigual: la de quienes creen que los periodistas estamos para replicar sus mensajes sin condiciones, mientras ellos eligen cuidadosamente en qué medios pagar publicidad.
Es momento de romper ese ciclo.
Valorar tu trabajo es también valorar el periodismo turístico. Es recordar que una publicación no es solo un texto: es un espacio de confianza con tu audiencia, construido con años de credibilidad.
Y esa confianza no se negocia, ni se regala.
Así que la próxima vez que te escriban con un pedido así, podés responder con respeto, pero con claridad:
“No publico sobre lugares en los que no estuve ni fui invitado oficialmente. Y las entrevistas o espacios de difusión son servicios profesionales que se acuerdan y cotizan previamente.”
No se trata de cerrarse a colaborar, sino de hacerlo con conciencia y dignidad profesional.
Porque el turismo necesita periodistas libres, no repetidores de gacetillas.
Y porque, al final, tu trabajo vale… y decirlo también es una forma de enseñar.





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Excelente artículo sucede mas seguido de lo que se pensaria!